Salmorejo – versión baja en FODMAP

El salmorejo es una sopa fría tradicional de tomate del sur de España. Se parece al gazpacho, pero es más cremosa y con más sabor. Es ideal para los días calurosos, pero la versión clásica tiene ingredientes que no son aptos para una dieta baja en FODMAP.
Por suerte, con algunos ajustes inteligentes, puedes disfrutar de esta deliciosa especialidad española con la misma textura y sabor que la original, pero con un efecto más amable en tu estómago.
Ingredientes (para 2 personas)
• 4 tomates pera maduros
• 35 ml de aceite de oliva virgen extra
• 2 huevos
• 10 ml de vinagre de arroz o de manzana
• Jamón serrano en taquitos
• 2 dientes de ajo (solo para aromatizar el aceite)
• Sal
Preparación paso a paso
- Pon el aceite y los dientes de ajo pelados en un cazo. Calienta a fuego muy bajo durante unos 10 minutos sin que hierva. Retira del fuego, deja enfriar y quita el ajo.
- Cuece los huevos 12 minutos en agua hirviendo. Enfría en agua fría, pélalos y reserva.
- Tritura los tomates hasta obtener una textura muy fina. Añade el aceite aromatizado (sin ajo), sal, vinagre y un huevo duro troceado. Mezcla de nuevo hasta lograr una crema densa y suave.
- Deja enfriar en la nevera al menos un par de horas.
- Sirve en cuencos y decora con el otro huevo duro picado, los taquitos de jamón serrano y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
Consejos FODMAP
• Tomates: usa preferiblemente menos maduros, sobre todo en la fase de eliminación o si eres sensible a la fructosa; los menos maduros contienen menos fructosa.
• Ajo: no lo añadas directamente a la sopa. Úsalo solo para aromatizar el aceite y retíralo después. Los fructanos del ajo no se disuelven en grasa, así que no pasan al aceite.
• Jamón: elige jamón serrano natural, sin conservantes ni azúcares añadidos, para facilitar la digestión y cuidar tu microbiota.
• Pan: la versión tradicional lleva pan (rico en fructanos), pero aquí lo sustituimos por huevo duro, logrando una textura cremosa sin problemas digestivos.
• Vinagre: cualquier tipo está bien, aunque el de arroz es más suave. Para cuidar la flora intestinal, usa vinagre de manzana sin filtrar. No te preocupes: los azúcares se reducen durante la fermentación.